Muy a menudo nos encontramos con cosas en nuestra rutina que simplemente usamos o consumimos porque están ahí o porque es lo que hace todo el mundo sin pararnos a pensar «por qué» ni «para qué» lo hacemos. Simplemente las aceptamos como algo más de un día a día «normal».

Un ejemplo muy claro de esto es Instagram. Es muy común que cuando una persona quiere lanzarse de conseguir clientes online, el primer paso lógico sea empezar a compartir contenido en esta red social. Quizá porque es fácil, quizá porque es lo que todo el mundo hace.

Poco a poco vas compartiendo ilustraciones y empiezas a buscar cómo llegar a más gente utilizando Instagram, a empaparte de información, y la cosa va tal que así:

Que si el algoritmo.

Que si los hashtags.

Que si ahora cuentan los guardados y no los likes.

Que si hay que compartir contenido más personal, pero tú no quieres aparecer en cámara.

Que si hay que hacer vídeo porque la foto ya no funciona (¿me monto una productora o qué?).

Que si hay que publicar exactamente 327,5 veces a la semana para que tus seguidores no se olviden de ti.

Que si ahora ha cambiado el dichoso algoritmo y lo que aprendí ayer ya no sirve.

Qué agobio. Qué pereza.

Cuando te das cuenta, han pasado varios meses y no quieres ni contar las horas (y la energía mental) que le has estado dedicando a Instagram. Con «suerte» todo este esfuerzo se ve reflejado y ahora tienes algo más de seguidores, likes y comentarios que cuando empezaste.

Pero, ¿es lo que buscabas?¿qué esperas conseguir teniendo algo más de seguidores?¿quieres seguir así para siempre?

Puede que sí o puede que no. Pero es importante preguntárselo para tener claro hacia dónde nos queremos dirigir y así poner nuestro esfuerzo en ir por ese camino.

Como bien dijo Séneca: «A quien no sabe donde va, ningún viento le es favorable».

Un cambio de enfoque acerca de Instagram

Sabes de sobra que Instagram nos puede hacer perder muchísimo tiempo y energía, tanto si solo consumes contenido como si lo produces. Y esto no es casualidad, ya que está específicamente diseñada para eso.

Es importante tener claro cuanto antes para qué vamos a utilizar Instagram, cuál va a ser nuestro objetivo en esta plataforma. O preguntarnos incluso si Instagram es la plataforma idónea para estas metas.

Puede que tus objetivos sean conseguir encargos, vender merchandising, ilustrar libros o simplemente utilizar esta red social a modo de portfolio.

En cada una de estas opciones priorizaremos cosas diferentes. Por ejemplo, no merece la pena que que te preocupes continuamente por los seguidores o los likes si tu único objetivo es utilizar tu cuenta como portfolio para que te vean las empresas con las que quieres trabajar.

De este tema hablamos en más profundidad en nuestro curso Ilustragram.

En conclusión, es importante tener claro cuál es nuestro objetivo final, ya que Instagram no es más que una herramienta para acercarnos a esos objetivos (y no es la única ni tiene por qué ser la mejor).

¿De verdad quieres empezar por Instagram?

Gran parte de las personas con las que trabajamos tienen más o menos claro que lo que quieren de Instagram es conseguir clientes para sus ilustraciones (ya sea para ilustrar libros, para encargos, prints, etc.) y realmente Instagram puede ayudarte con esto, pero como una parte dentro de una estrategia global.

Verás, lo que puede aportarte Instagram es principalmente visibilidad, es decir, que más gente vea lo que haces. (Además, tanto tú como yo sabemos que si no pagas por publicidad esta visibilidad es cada día más difícil de conseguir, pero bueno, de eso ya hablamos otro día, que el tema da para rato.)

Es un error muy común pensar que una mayor visibilidad se traducirá necesariamente en más clientes o más ventas, pero no tiene por qué ser así. Si no tienes una buena forma de incentivar que esas personas que te ven den el paso de convertirse en clientes, de nada te servirá que más gente vea lo que haces y todo tu esfuerzo caerá en saco roto.

Por lo que, una vez que tengas claro tu objetivo, es importante que antes de ponerte a subir contenido a Instagram a lo loco, pienses si tienes todas las piezas en su lugar y que te permiten llegar a tu objetivo.

Ya sabrás de sobra que siempre recomendamos empezar trabajando en tener tu propia web y tienda online que te ayude a conseguir clientes antes de pensar en trabajar en la visibilidad, para evitar así que esta visibilidad caiga en saco roto como hemos dicho.

Pero si quieres empezar por algo más simple, puedes simplemente darle unos retoques a tu perfil de Instagram.

No sabes cuántos perfiles de ilustración me encuentro que trabajan muy bien las redes, y hacen cosas alucinantes, pero cuando entro en su perfil no me queda claro si les puedo comprar o encargar algo o no. Y, como yo, habrá muchos más que podrían haber terminado convirtiéndose en clientes si hubiese habido una planificación previa a subir contenido.

Así que, como mínimo, te recomendaría que revises tu perfil de Instagram y dejes claro, al menos en tu descripción, qué ofreces y cuál sería el siguiente paso para alguien que quiera hacerte un encargo. Valdría algo tan simple como «ilustro libros infantiles, info por MD«.

Es decir, comienza por asegurarte de que si una persona ve lo que haces sepa cómo contratarte o comprar lo que ofreces (mejor si es a través de tu propia web) y solamente cuando esto esté resuelto te concentrarás en cómo llegar a más personas.

Ideas y conclusiones

Hay que tener claro que Instagram es simplemente una herramienta para conseguir tus objetivos y no siempre tiene sentido utilizarla. Tener esto claro te ayudará a evitar esa sensación de que eres esclavo o esclava de esta plataforma y necesitas estar continuamente creando contenido y prestando atención a los likes, comentarios, guardados, etc.

Como resumen final, aquí te propongo un paso a paso para ponerte en marcha:

1. Define claramente cuál es tu objetivo (puedes combinar varios).

2. Lista qué elementos necesitas para conseguir ese objetivo y por dónde tienes que empezar a trabajar, así empezarás a definir tu estrategia. En la mayoría de los casos es recomendable comenzar con tu propia web para convertir a los futuros visitantes en clientes y luego trabajar en conseguir más visibilidad.

3. Ahora, establece qué papel juega Instagram en esta estrategia global y especifica cómo te puede ayudar a alcanzar tus objetivos.

4. Investiga qué estrategias concretas vas a seguir dentro de Instagram, y aprende la mejor forma de aplicarlas en tu caso concreto. Por ejemplo, si tienes claro que lo que tienes que hacer para alcanzar tus objetivos es ganar seguidores nuevos, puedes hacer colaboraciones con otras cuentas o sorteos animando a la gente a compartir tus publicaciones en sus historias.

5. Diseña un plan de contenidos teniendo esto en mente, así evitarás estar día a día pensando qué publicar y te ayudará a tener una coherencia global. No seas demasiado ambiciosa/o con este plan de contenidos, ya que tendemos a sobrestimar lo que podemos hacer. Ante la duda, mejor poco y hecho que mucho y a medias.

6. Último paso y más importante: ponte en marcha, analiza qué acciones te están acercando más a tus objetivos y redefine tu estrategia si es necesario.

Si quieres más ayuda para sacarle el máximo provecho a tu Instagram como ilustrador o ilustradora, te recomiendo echarle un vistazo a nuestro nuevo curso Ilustragram pulsando en el botón de abajo.